¿Y tú quién eres?
Cinematográficamente,
la película está bastante bien hecha, no se hace pesada y el guión con toques
de humor hace que sea un drama llevadero. Además el funcionamiento de la
residencia se asemeja bastante a lo que nos podemos encontrar en la realidad.
En
cuanto a los profesionales, me gustaría destacar que realizan todos una labor
estupenda, exceptuando a veces, no siempre, que la enfermera trata a los
ancianos como niños, privándoles de toda autonomía e incluso a veces echando
cosas en cara, como es el ejemplo de cuando se orina Ricardo. El médico me
parece un estupendo profesional, y Ana, la nieta, sin duda es una cuidadora
excelente.
Escenas
que me han llamado la atención por ejemplo, es que nada más empezar la
película, ya se ve que el abuelo no come con el resto de la familia, sino que
lo hace a parte, lo cual no me parece bien, ya que es un miembro más de la
familia y debe estar integrado como tal. Tras esto, deciden dejarlo en la
residencia por comodidad, lo cual, por triste que parezca, no me escandaliza ya
que en nuestros días aunque no lo hayamos visto de cerca, si que sabemos que se
hace, y mucho.
Ana,
la nieta, deja todo para centrarse en los cuidados de su abuelo, lo cual la
honra como persona. Además se ve que tiene unos grandes dotes como tal.
Personalmente,
la película me hace sentir lo bonita que puede llegar a ser nuestra profesión
de cuidadores de personas que realmente nos necesitan. También me ha hecho
reflexionar sobre fallos que cometemos los profesionales sanitarios con nuestra
mejor intención, como cuando la enfermera invita a Ana a la entrevista que
tiene con el médico sin consultar previamente al interesado, negándole así su
autonomía.